Yacimiento arqueológico de La Cabilda, una aldea hispano-visigoda en Hoyo de Manzanares
El yacimiento arqueológico de La Cabilda, aldea que se mantuvo activa en torno a los siglos VII y IX, se encuentra en un asentamiento hispano-visigodo al pie de la sierra de Hoyo de Manzanares, en la Comunidad de Madrid. En él se ha aplicado un modelo de arqueología social, donde han trabajado numerosos voluntarios. La tradición local y la leyenda legitiman su importancia con un añadido: la aparición milagrosa de su patrona en la zona, la Virgen de la Encina. Acércate a conocerlo, es gratuito, no hay que pagar entrada.

Yacimiento arqueológico del parque de La Cabilda, en Hoyo de Manzanares, un espacio natural protegido dentro del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.
El yacimiento arqueológico de La Cabilda, ubicado al este del casco urbano de Hoyo de Manzanares, es un asentamiento rural, con un modelo de hábitat aldeano anterior a la expansión feudal. Sus elementos arqueológicos se relacionan con ambientes domésticos, productivos, funerarios y posiblemente de culto.
La Cabilda, junto a los asentamientos de Navalvillar y Navalahija, en Colmenar Viejo, formaban un grupo de aldeas con cronología similar que vivieron un importante momento histórico en la zona de la sierra de Madrid, entre la Antigüedad Tardía y la Alta Edad Media.
Los trabajos arqueológicos se han difundido y compartido entre el público y los vecinos de la localidad, aprovechando para crear un estrecho lazo entre este yacimiento y la población hoyense, y han sido llevados a cabo por más de cien voluntarios, con ocupaciones muy diversas y edades comprendidas entre los 18 y 70 años.
Tumbas excavadas en la roca y restos visigodos
Se trata de un asentamiento rural en el que hay una zona poblada, una zona de enterramiento y probablemente una zona de culto ligada a la ermita de Santa Ana, en torno a la cual se instaló el cementerio municipal en el siglo XIX.
Esta aldea rural de pequeñas dimensiones era conocida desde los años 90, cuando descubrieron tumbas excavadas en roca de la época visigoda dentro del cementerio municipal.
El Ayuntamiento de Hoyo de Manzanares realizó los primeros trabajos arqueológicos y protegió los restos de una zona con estructuras tardorromanas y una necrópolis visigoda. En 2013, retomaron el proyecto para crear con todos estos descubrimientos un recurso cultural, turístico y de desarrollo que era necesario divulgar.
Más de 23 edificios y un cementerio
El terreno de la aldea ocupa una superficie de unas 2,5 hectáreas, y tiene dos áreas cementeriales, la municipal y la de la comunidad judía, además de construcciones residenciales contemporáneas. Desde 2014, han realizado ocho campañas de excavaciones.
Se han identificado al menos 23 edificios y un área cementerial con cuatro sepulturas excavadas en roca. Los muros están levantados con mampostería de granito y las plantas son cuadrangulares. En ocasiones, aprovecharon el terreno rocoso como cimiento y apoyo, o incluso como parte del alzado de sus construcciones.
Una de las construcciones de la que se han encontrado restos es cuadrangular irregular, tiene cuatro estancias, y ocupa una superficie de 75 metros cuadrados.
Las unidades domésticas se situaban en torno a espacios productivos comunitarios donde se supone que desarrollaban actividades propias de una economía mixta agropecuaria. Por otra parte, aprovechaban los recursos de la caza, la recolección y la explotación de los recursos líticos, y comerciaban con otras poblaciones.
El núcleo rural básico del periodo tardoantiguo estaría en el centro de la meseta, con viviendas, espacios para almacenar y dependencias domésticas. Ha sido muy importante la constatación arqueológica de la existencia de una fase emiral en la cronología del yacimiento.
Restos cerámicos y objetos metálicos
Se han localizado depósitos de ceniza con restos cerámicos, vertederos, vasijas cerradas asociadas al almacenamiento (ollas, orzas y cántaros), a los usos culinarios y para la mesa, que fueron elaboradas con pastas anaranjadas o pardas.
Los objetos metálicos encontrados son de uso personal: por ejemplo, el chatón en plata de un anillo epigrafiado, con una leyenda cristiana de invocación y protección, un pendiente de aro en plata y bronce o un hebijón en bronce. En cuanto a los objetos de hierro que se usaban en la vivienda, destaca un yesquero de hierro para encender el fuego, cuchillos, clavos y bisagras. Entre las herramientas, una cardadera, para el tratamiento de la lana, y también un lingote de hierro de más de 2 kilos.
El granito, tan habitual en esta zona, fue utilizado en los molinos de mano para moler las bellotas y algunos cereales, ya que los suelos no son apropiados para el cultivo por su acidez.
Los fragmentos de vidrio encontrados tienen tonos verdosos, azulados y amarillentos, con formas abiertas, típicos de utensilios como cuencos, copas o vasos.
Arqueología social e implicación de los vecinos con trabajos voluntarios
Numerosos voluntarios y personas interesadas han participado en las excavaciones y en el trabajo de recuperación de los materiales, bajo la dirección y supervisión técnica del equipo científico. Han dado a conocer este patrimonio arqueológico e histórico de la zona serrana para concienciar a la sociedad en su investigación, recuperación, protección, conservación y difusión.
La implicación ciudadana en esta línea estratégica de Desarrollo Local del ayuntamiento y de la Comunidad de Madrid hizo que este enclave se abriera al público, y ha pasado a ser un atractivo elemento turístico y económico para el municipio.
En cada campaña arqueológica, se realizaron actividades de educación y sensibilización en el colegio y en el instituto de Hoyo de Manzanares. Asimismo, destaca el programa «Arqueólogos por un día», dirigido al público familiar (desde 2018).
Durante las campañas de 2022 se restauraron gran cantidad de estructuras exhumadas en la campaña anterior, sobre todo en las áreas central y meridional, para finalizar las intervenciones arqueológicas.
Por otra parte, la asociación local El Ponderal, creada en 2014, ayuda a dar continuidad a esta investigación y a difundir los temas culturales y patrimoniales del municipio. Y se han creado sendas de aproximación e información asociadas, a través de la conservación y protección del yacimiento y su habilitación para el turismo cultural.
Un plan familiar con niños: talleres educativos en La Cabilda y pícnic
De manera periódica, la Dirección General de Patrimonio Cultural y el Ayuntamiento de Hoyo de Manzanares organizan jornadas educativas y talleres familiares para descubrir conjuntamente la arqueología como disciplina científica e implicar a la población en sus descubrimientos.
Si quieres hacer un plan original con tus hijos, llévalos a La Cabilda. Puedes ver el vídeo sobre el yacimiento arqueológico que adjunto al final para hacerte una idea de las actividades, los talleres educativos que se realizan y el fabuloso entorno granítico que rodea su paisaje. Consulta al ayuntamiento para saber cuándo se imparten estos talleres y cómo se organizan las visitas.
En este entorno tienes también una zona de pícnic donde podrás comer o merendar y disfrutar de un agradable día en el campo, en un entorno con vegetación típica del bosque mesomediterráneo de encinares, alcornoques y enebros, que caracteriza el paisaje de Hoyo de Manzanares.
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Fuentes de información:
Gómez Osuna R, García Aragón E, Pozuelo Ruano A, Colmenarejo García F, Fernández Suárez R. El yacimiento arqueológico de La Cabilda (Hoyo de Manzanares). Una aldea del siglo VII d.C. al pie de la Sierra de Guadarrama. Cuadernos de Estudios. Revista de investigación de la Asociación Cultural Pico San Pedro. 2016;30:43-65.